miércoles, 23 de abril de 2014

A simple vista

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Uno de los primeros “sentidos” que nos ayudará a identificar el percebe es la vista, si tenemos en cuenta algunas característica podremos diferenciarlos. Este crustáceo lo podremos encontrar en España bajo las siguientes denominaciones, percebe en Galicia, peu de cabrit en Cataluña, lanperna en País Vasco.

El “percebe gallego” o de roca se puede distinguir con un simple golpe de vista. Entre sus características está el tamaño, son más cortos, gruesos y tienen una tonalidad más oscura que los de otras zonas. El percebe gallego puede alcanzar una talla de 5 cm de longitud.






El denominado “percebe marroquí” que también se da en el Atlántico, zona centro y este, es más largo y delgado y su coloración es menor. Procede de aguas más cálidas y se adhiere a sustratos de piedra arenisca, no granítica como en el caso del percebe gallego.


En el mercado español podemos encontrarnos cualquiera de estos dos tipos de percebe: el gallego y el marroquí. También se puede ver en algún mercado el percebe canadiense que tiene similitudes con el percebe marroquí pero le diferencia una uña muy característica. 



Vista:
  • percebe gallego: más grueso, más corto, tonalidad más oscura
  • percebe marroquí: más largo, más delgado, tonalidad más clara

Gusto:
  • percebe gallego: “sabe a mar”, sabor muy intenso, carne compacta 
  • percebe marroquí: sabor menos intenso, carne más blanda




El percebe posee un bajo contenido en grasa y colesterol y aportan gran cantidad de vitaminas B1 y B2 además de ser ricos en potasio y otros minerales. De modo que es saludable incluirlo en nuestra dieta.

Cuéntennos su experiencia ¿en el mercado los diferencia correctamente? ¿efectivamente se nota la diferencia de sabor? envíennos sus propias imágenes y dígannos ¿es merecida la fama de “mejor marisco”?

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